“…nuestro Instituto, rama del tronco franciscano, y por añadidura capuchino, debe estar basado en una profunda humildad; una obediencia ciega y una total pobreza” (Luis Amigó, Obras completas 1920)

El carisma y espiritualidad de las Hermanas Terciarias Capuchinas y de los Religiosos Terciarios Capuchinos están impregnados de los valores franciscanos:

PENITENCIA: conversión constante a Dios y a los hermanos a partir de la abnegación y renuncia personales y del propio cargar con la cruz.

CONTEMPLACIÓN: “…el verdadero amor del prójimo no puede existir sin el amor de Dios… el mejor medio de hacer bien a los otros es el de estar bien llenos del espíritu del Señor…” (Luis Amigó, Obras completas 2361)

MINORIDAD: Servir a los demás viviendo la conversión hacia Dios y hacia los hermanos desde la abnegación, la pobreza, la

humildad… hacerse todo para todos… ponerse en el último lugar… de suerte que pueda surgir el amor fraterno.

FRATERNIDAD: Poner a Cristo como centro de todo; un renovado revitalizarse en la oración para comunicar a los hermanos el amor

de Dios; fundarse en la caridad para estar dispuestos a actuar como menores y servidores; concebir la autoridad como servicio.

“No habrá distinción entre las Religiosas; todas ellas se ocuparán indiferentemente en los oficios en que les coloque la santa obediencia”. (Luis Amigó, Obras completas 2294)

TODAS SE LLAMARÁN HERMANAS

* Hna. Amparo Alejos Morán